25 junio 2012

CONCIERTOS

DÍA DE LA MÚSICA. Matadero Madrid. 22-23 junio de 2012.

Sábado.

La jornada del sábado comenzaba huyendo de las altas temperaturas como de la peste y pertrechando los cuerpos en la Nave 16 para asistir a uno de los descubrimientos más agradables del fin de semana. FRANKIE ROSE se independizó de Crystal Stilts, Vivian Girls y Dum Dum Girls para dar rienda suelta a su ingenio y convertirse en émula aventajada de Siouxie Sioux. Su pop oscuro gana enteros en directo, y canciones como “Moon on My Mind”, “Night Swim” o “Had We Had It” lucen una intensidad que apabulla. Como apabullante fue asimismo su versión de “A Forest” de The Cure, una recreación fidedigna de la original con un excepcional toque de glamour femenino. 

Tras el concierto de la de Brooklyn aún quedaba tiempo para mendigar alguna sombra y asistir a los compases finales de FANFARLO, que debieron terminar cocidos como langostas tras su hora de exposición salvaje al astro rey. Y aunque su música se apoye en demasiados lugares comunes del pop de la escuela Belle and Sebastian, es cierto que los violines, metales y campanas dan un toque muy selecto a sus canciones, por no hablar de la originalidad de ver a un frontman (Simon Balthazar) que alterna voz, guitarra y saxo. Tras ellos era hora de acercarse a una banda ecléctica y solvente como pocas. SPOON venían sin material nuevo conocido, pero ni lo necesitan. En su defecto su concierto fue como la celebración al sol de sus casi veinte años de carrera a la sombra.  Cierto es que se centraron en sus más recientes discos, sin que pudieran faltar los aires de rock americano de “The Way We Get By” y “Don´t Make Me A Target”, el pop radiante de “You Got Yr Cherry Bomb” o el puntillo funky de “I Turn My Camera On” o las formidables “Don´t You Evah” y “Written In Reverse”. No tienen nada que envidiar a Wilco, ¿verdad?. Excelente repertorio, excelente concierto, excelente banda.

Como excelentes son MERCURY REV, de eso no hay duda. Y si vienen ya con “Deserter´s Songs” (98) bajo el brazo, esto es el acabose. Como decía Carlos Anthony Molina, canciones para la noche tocadas al sol. Este álbum marcó un antes y un después en el devenir de la banda, podría decirse que los puso en el mapa, contiene algunos de sus temas más hermosos, así que el homenaje no es moco de pavo. Y su ejecución fue bastante fiel a su formato original, en estricto orden pero con algunas variantes, como una base rítmica más pronunciada para “Endlessly” o un asombroso y apocalíptico final progresivo para “Opus 40”. Ver a Mercury Rev es asistir a un concierto maravilloso, pero también como ir al teatro, o al circo o al ballet. Es un ir y venir constante de belleza sobre el escenario, con un maestro de ceremonias que jamás pierde esa sonrisa beatífica (Jonathan, te queremos), metido en el papel de desvelarnos con su vocecilla de ángel y gestos explícitos el enigma de cada canción. Ni hace falta decir que “Holes”, “Goddess On A Highway” y “The Funny Bird” sonaron regias, ni que “Delta Sun Bottleneck Stomp” fue el jubileo esperado. Tras honrar el álbum de cabo a rabo regalaron otras dos, “The Dark Is Rising” y “Senses on Fire”, sin importarles pisar el comienzo del partido o de Love of Lesbian. Y de allí no se movió ni el Tato hasta el defintivo “the end”.

Pues eso, huir del fútbol y de Love of Lesbian como fuera. La opción más atractiva era asistir al desenlace de los londinenses BRETON, ese colectivo misterioso al que por fin se pudo poner cara. Y hay que reconocer lo jugoso de su propuesta, una mezcla de electrónica y math rock con pinceladas de punk y experimentación sonora, una aleación de lo más entretenida y sofisticada. A ratos pueden parecer una copia exacta de Foals, o bien emular el rock electrónico canalla de James Murphy. Muy interesantes, aunque quizá más apropiados para darlo todo al final de la noche.

A MÄXIMO PARK los tenía muy olvidados, aunque confieso que una vez tuve mi vena indie. Y confieso que me gustan mucho The Jam, así que es imposible que algunas de sus canciones no me den vidilla. “A Certain Trigger” (2005) fue en su día un hallazgo refrescante y me los chupé sin dudar en festivales varios. Y ahora vuelvo a encontrarme con el saltimbanqui desaforado y espídico que es Paul Smith, al que o bien amas o bien odias. Y mira tú por donde, hoy me ha dado por amarlo, aunque las canciones de su reciente “The National Health” (2012) no lleguen ni a la suela del zapato a aquellas “Graffitti”, “Limassol”, “I Want You To Stay” o “Apply Some Pressure” que, por supuesto, suenan aquí y ahora, y cómo suenan. De su nuevo disco hay una que no pasa desapercibida y es “Hips and Lips”, con un trallazo de estribillo de toma pan y moja. Pura energía y mucha diversión.

Y para cerrar la maratón, el descubrimiento de otro curioso grupo con muchos adeptos. METRONOMY podrían clasificarse como banda de electro-pop, pero hay que leer entre líneas. En los recovecos y pliegues de su propuesta encuentras mucho funk (tremendo su bajista, el negrito Gbenga Adelekan), un poco de soul, algún que otro guiño al punk, incluso sabores tropicales. Su cabeza pensante, el hierático Joseph Mount, es un pequeño calco de Ira Kaplan basculando entre micro, guitarra y teclado. No son nada del otro mundo, pero hay que reconocer que “Corinne” y “The Look” resultan pegadizas hasta decir basta.

Pena por habernos perdido a Tindersticks, Alejandro Escovedo, JD McPherson o David Thomas Broughton, alegría por haber vivido lo vivido y sobrevivido al calor como lagartos. Hasta otra.

5 comentarios:

Fede Sánchez dijo...

Lo siento, fuí con buena disposición a ver a Maximo Park, me tragué todo el concierto por un amigo (nunca valorará lo suficiente el esfuerzo que hice) pero no soy capaz de tragar esa colección de ooooohs, temas coreables y energía de adolescente británico. Tal vez con algo más fuerte que la triste Heineken pudiera soportarlo con un poco de agrado

Mary dijo...

Pues eso llevaba yo en el cuerpo, más cervezas que el copón, y por eso me divertí...y también llevaba todavía el bienestar y la sonrisa de oreja a oreja que me habían dejado Mercury Rev...

The Black Meeple dijo...

Si hubiese podido ir (soy de Barcelona) me hubiese encantado ver a David Thomas Broughton.

Iba a preguntarte qué tal, pero veo que no lo viste

Fede Sánchez dijo...

Yo pude ver David Thomas Broughton en el Tanned Tin 2.011 con la loop station y es una experiencia que le recomiendo a todo el mundo.
http://www.youtube.com/watch?v=yR37NUJydek&feature=related

Mary dijo...

Pues me quedé con las ganas de ver a David, pero es que las horas (y las temperaturas, vaya) eran intempestivas. Aunque ya lo había visto de refilón, precisamente en Barcelona, y es toda una experiencia. Saludos, Mr. Meeple. Saludos, Fede.