22 marzo 2009

RETROSPECTIVAS

DONOVAN. Sunshine Superman.

Joyas de los sesenta (1ª parte).

Reinventarse o morir. Nace un nuevo formato: series de retrospectivas. La primera tiene que ver con los años 60, década evocadora donde las haya. Volcarse en ella de vez en cuando es un ritual obligatorio, amén de un placer indescriptible. El elegido para el estreno es Donovan, toda una figura del periplo, referente inmediato que, por razones diversas, nunca ha sido tratado con la deferencia debida. Al menos no con la devoción con que la historia trata a otros paisanos coetáneos (ejemplo: The Beatles y The Rolling Stones). Mucho le deben, sobre todo los primeros. Y no solo unas clases amistosas de punteo a la guitarra.

Sunshine Superman” (66) alumbra la primera inflexión en la carrera de Donovan: del folk a la psicodelia. Juegos de palabras, mitología, historias caballerescas, referencias a las drogas; temática copiosa y muy pulida. Producción generosa pero no rimbombante; abundan tablas y sitares, violines, clavicordios, aunque el resultado es ligero como una pluma. Los mantras aparecen en “Three King Fishes”, “Ferris Wheel” y “The Fat Angel” (las peregrinaciones a la India, sin embargo, vendrían después). El folk sigue coleando, si bien adornado en “Legend of a Girl Child Linda”. El jazz se cuela en el remate de la grasienta “Bert´s Blues”, dedicada a su colega Bert Jansch, otra eminencia del folk británico. En “Guinevere” el escocés recrea a la perfección la melodía y los viejos instrumentos medievales, y en “The Trip” borda un blues de marca mayor. La preciosa “Celeste” cierra el álbum (ojo, edición americana), con las estrofas enmarcadas con gusto exquisito entre acordes (gran voz la de este tipo, suave, efervescente o agitada según se tercie), contagiando aquella mitificada y extinta sensación hippie de paz. Aunque lo mejor del álbum quizá sean los dos cortes que abrían sendas caras (sí, recordemos: los vinilos tenían haz y envés). “Sunshine Superman” inauguraba la primera, con su ritmo chispeante y pegadizo. Y “Season of the Witch” (hay versiones a espuertas, pero nada como escuchar la original), hacía lo propio con la segunda, no peor por llamarse B, digamos que hasta mejor.

Súper-cantante, excelente guitarrista y mejor poeta, no puede haber recopilación sesentera que se precie sin Donovan Phillips Leitch. Quizá por eso suele estar en todas. Y en esta también, faltaría plus.

www.donovan.ie

20 marzo 2009

DISCOS

M.WARD. Hold Time.

Pastoral americana.

En el mundo del rock está bien claro quién es quién. Están los músicos y los payasos. Están los “sudasangre” y los vividores. Están los auténticos y los impostores. Matt Ward está entre los primeros en todas las dualidades posibles. Y “Hold Time” (2009) no hace más que confirmar sus prerrogativas, que ya no son simplemente las de un aceptable singer-songwriter, un muchachuelo del norte con ganas de haber nacido en el sur. En “Hold Time” convoca a las almas del acabóse americano y todas acuden a su llamada: Woody Guthrie, Buddy Holly, Little Richard, Johnny Cash, Gram Parsons, Roy Orbison, Howe Gelb… Sí, hombre, ¿por qué no meter a Howe Gelb en este saco de impepinables?. Al fin y al cabo ya es una leyenda, y M.Ward se mueve en la pomada gracias a él (y a sus dotes; puede haber éxito sin padrino, pero no sin dotes). De las buenas enseñanzas siempre queda poso; como el dueto con Lucinda Williams en “Oh Lonesome Me”, que tanto recuerda al tutor y su pasado mano a mano con otra Williams, Victoria. Pero el pupilo ya es mayor de edad, viaja solo y es tan capaz de versionar con absoluto tacto (“Rave On” o la ya mencionada “Oh Lonesome Me”) como de componer variopintas piezas nacidas para la gloria (“For Begginers”, “Hold Time” o “Stars of Leo”). Un nómada con una mochila llena de historia, trotando por los caminos, buscando el sonido de la verdadera voz de América.

www.mwardmusic.com

19 marzo 2009

DISCOS

THE WAR ON DRUGS. Wagonwheel Blues.

Addenda a 2008.

Todos los años pasa lo mismo; cuando ya has cerrado el candado del ejercicio anterior emergen deudas que hay que imputar obligatoriamente al ejercicio en curso (frase adaptada por deformación profesional). Y llega la duda: ¿disco actual o retrospectiva?. No hay que ser cuadriculados ni científicos. El tiempo es inacotable. Así que lo mismo da descubrir a The War on Drugs hoy mismo o hace meses. La única puñeta es haberlos descubierto recién finiquitada su gira española.

Wagonwheel Blues” (2008) es todo un descanso; es de esas cosas de las que has leído hasta la saciedad, sujetas a análisis ajeno y expuestas a suspicacias extremas. La música de hoy, los nuevos grupos de hoy, todo es fuente de suspicacia, porque hay que ser realistas, la rueda se paró hace tiempo y la novedad es un bien escaso (y de primera necesidad). Hay que escudriñar para encontrar algo que abra nuevas dimensiones, que impacte como es debido. Estos tipos de Filadelfia no son los Curie ni Graham Bell, pero al menos han facturado un disco de los que pellizcan la carne. Su rock clásico está lleno de texturas y éter, como un casamiento feliz entre Bob Dylan y The Velvet Underground. Hay canciones majestuosas (“Taking the Farm” y “There Is No Urgency” tienen premio), envolventes impasses instrumentales, ejercicios de aguante en la onda progresiva y un mensaje adulto y solemne. Es solo un disco de nueve cortes, una obra compleja a medio cocer, el dubitativo debú del principiante, pero es una infusión de auténtica esperanza. La esperanza de una digna descendencia para los viejos.

www.thewarondrugs.net

03 marzo 2009

DISCOS

CLEM SNIDE. Hungry Bird.

Retorno al rock en sociedad.

No hace ni dos años que Eef Barzelay hablaba de su segundo disco en solitario radiando a la vez el final de Clem Snide. Poco tiempo desde entonces, las diferencias rápidamente limadas (que aprendan otros) y “Hungry Bird” (2009) que ve la luz después de meses en el armario de los trastos. La reunión parece que va en serio y no es solo un apaño para sacudir material atrasado: en abril estarán girando ampliamente por nuestro país. Una noticia más de grupos que van y vienen, si no fuera porque Barzelay es un compositor de pedigrí y en “Hungry Bird” alcanza un nivel sobresaliente. El comienzo con “Me No” es de flechazo; la cuarta mano portadora de un testigo puesto en marcha por Neil Young, traspasado a REM y recogido después por Wilco. “Born a Man” es elegancia mayúscula para sala de té en un hotel de cinco estrellas. Gran canción también “Hum”; Jeff Tweedy la hubiera comprado sin duda para “Yankee Hotel Foxtrot” o “A Ghost Is Born”. “The Endless Ending” tiene duende, sí, el del flamenco. “Our Time Will Come” y “Beard of Bees” reconcentran la atmósfera de Nashville (ciudad de referencia vital), con mensajes que van del pesimismo decandente (“it´s true, our time will come long after we die”) a la romanticona obviedad (“when you´re here with me that´s the only time that I feel free”). Y después está la divina y larguísima “Pray”, con su alegría sumergida, sus coros y falsetes, y su enigmática curva final. Un espléndido disco que justifica el examen de conciencia, la ingestión del orgullo y el volver a empezar.

www.clemsnide.com

01 marzo 2009

AGENDA

MARZO: CONFIRMACIÓN DE PREDICCIONES PREDECIBLES.

Viene un tiempo (de crisis).

Ya lo decía Neil Young: “Viene un tiempo…”. A lo que Tomás, estimado compañero de trabajo y desayunos, añade: “…de crisis”. En efecto, la recesión se ceba notoriamente con el mundo de la música, más en concreto, con el de los festivales. El rumor a voces se confirma: este año no hay Summercase y posiblemente ningún otro evento made-in-Sinnamon. La coyuntura lo pone a huevo para echar la culpa a la economía mundial, pero lo de Sinnamon no es asesinato, sino suicidio. Al final los únicos festivales veraniegos que subsisten con honor son los veteranos (FIB, Primavera Sound, Sónar, Azkena Rock), fondos de garantía para sponsors. Y algún otro, todavía en su tierna infancia, como el Estrella Levante SOS 4.8. (PJ Harvey & John Parish, Mathew Herbert Big Band, Spiritualized, The Prodigy, Underworld, Los Planetas, Babyshambles, Duffy, Keane..etc), que crece a contrapelo de los vientos críticos. A los festivales modestos, especialmente en el nordeste peninsular, el rebufo del embargo tampoco les llega. Ejemplo: In-Somni, Let´s Festival y Minifestival, tres festivales, tres, celebrados en un mismo mes (febrero) en una misma provincia (Barcelona). Está claro que la escasez no es un problema de mutación financiera, sino más bien de astucia nula.

Y citar a Neil Young al principio ha venido que ni al pelo: el notición de fin de mes ha sido su fichaje por el Primavera Sound 2009. Así que los que se quedaron sin verlo en el centro comercial de Arganda, por pereza o por ética, tendrán su merecida recompensa. Otros nombres anunciados para el festival barcelonés: My Bloody Valentine, Spiritualized, The Jayhawks, Yo la Tengo, Sonic Youth, Michael Nyman, A Certain Ratio, Throwing Muses, Aphex Twin, Andrew Bird, The Magnolia Electric Co., Bowerbirds, Bat for Lashes, Damien Jurado, Magik Markers. Como siempre, sentando cátedra.

Parece que la (presunta) crisis (musical) también afecta a las giras; antes había que cribar para componer las agendas, ahora hay que sudar para lo mismo. En marzo la oferta no está mal, pero si la cosa no vira costará hacer las de abril y mayo. El que avisa no es traidor.

THE SCRIPT- 2 marzo. Barcelona. Apolo.
3 marzo. Madrid. Heineken.

TELEVISION PERSONALITIES- 4 marzo. Barceelona. Apolo.
5 marzo. Madrid. Heineken.

BUZZCOCKS- 4 marzo. Madrid. El Sol.
5 marzo. Bilbao. Antzokia.
6 marzo. Zaragoza. La Casa del Loco.
7 marzo. Valencia. Mirror.
8 marzo. Castellón. Auditori.

JONATHAN RICHMAN- 7 marzo. Madrid. Neu!.
10 marzo. Barcelona. La (2).
14 marzo. Murcia. Auditorio Victor Villegas.

THE SPINTO BAND- 9 marzo. Madrid. Moby Dick.
10 marzo. Barcelona. Razzmatazz.

JOSÉ GONZÁLEZ- 10 marzo. Barcelona. Festival del Mil-lenni.
11 marzo. Málaga. Teatro Cervantes.
12 marzo. Madrid. Joy Eslava.

THE WAR ON DRUGS- 10 marzo. Madrid. Heineken.
11 marzo. Vigo. La Fábrica de Chocolate.
12 marzo. Bilbao. Rockstar.
13 marzo. Barcelona. Mephisto.

STIFF LITTLE FINGERS- 12 marzo. Bilbao. Antzokia.
13 marzo. Madrid. Joy Eslava.
14 marzo. Barcelona. Apolo.

THE SISTERS OF MERCY- 12 marzo. Barcelona. Razzmatazz.
14 marzo. Madrid. La Riviera.

MATT ELLIOTT- 14 marzo. Valladolid. Café Teatro.
15 marzo. Tarragona. Trono.
19 marzo. Gijón. Acapulco.
20 marzo. Zaragoza. La Lata de Bombillas.
21 marzo. Barcelona. Sidecar.
26 marzo. Vitoria. Jimmy Jazz.
27 marzo. Castellón. Sala por confirmar.
28 marzo. Madrid. Neu!.

Para terminar, el adiós definitivo a dos míticos personajes de la música que nos dejaron últimamente: Ron Asheton (The Stooges) y Lux Interior (The Cramps).