BECK. The Information.
El hermano mellizo de Odelay.
Hace no mucho celebrábamos con solemnidad el cumpleaños de un disco que, ya se decía claramente, iluminó las orejas de muchos: “Odelay” (96). Pues bien, diez años más tarde y después de varios intentos estrepitosamente fallidos, el irrepetible de Los Angeles da a luz al hermanito legítimo de aquel. “The Information” (2006) viene a demostrar varias cosas; primera, que lo mejor para que suceda un milagro es no creer en ellos; segunda, que el movimiento se demuestra andando (y currando); tercera, que hoy por hoy Beck Hansen es de los pocos que pueden permitirse el lujo de sonar como Massive Attack, Funkadelic, Pearl Jam, Marvin Gaye, The Beta Band, Violent Femmes, Chic, The Notwist, Wilco, Cypress Hill o Air en un mismo largo. Se sobra.
Y es que con poderes multiinstrumentales, master cum laude en sampleado y conexiones neuronales deficientes, se pueden hacer realidad muchos sueños. Sigamos mezclando ingredientes al estilo Panoramix: funky y folk en “Elevator Music”; samba, electrónica y R&B en “Cellphone´s Dead”; pop y psicodelia en “Soldier Jane”; trip-hop con armónicas y orquesta en “Dark Star”; scratching y batucadas en “1000 BPM”. Sigamos levantando obras de ingeniería imposible al estilo Calatrava: “Motorcade”, “The Horrible Fanfare/Landslide/Exoskeleton”. Y lo más importante, sigamos regalando al mundo buenas canciones: “Think I´m In Love” (cómo recuerda a “The New Pollution”), “Strange Apparition”, “Nausea” y “The Information” tienen vocación de eternidad sin abundar en excentricidades. Demente, pero ante todo músico. Ahora solo falta rellenar la cuartilla en blanco con el collage adecuado. Uff, no será fácil.
El hermano mellizo de Odelay.
Hace no mucho celebrábamos con solemnidad el cumpleaños de un disco que, ya se decía claramente, iluminó las orejas de muchos: “Odelay” (96). Pues bien, diez años más tarde y después de varios intentos estrepitosamente fallidos, el irrepetible de Los Angeles da a luz al hermanito legítimo de aquel. “The Information” (2006) viene a demostrar varias cosas; primera, que lo mejor para que suceda un milagro es no creer en ellos; segunda, que el movimiento se demuestra andando (y currando); tercera, que hoy por hoy Beck Hansen es de los pocos que pueden permitirse el lujo de sonar como Massive Attack, Funkadelic, Pearl Jam, Marvin Gaye, The Beta Band, Violent Femmes, Chic, The Notwist, Wilco, Cypress Hill o Air en un mismo largo. Se sobra.
Y es que con poderes multiinstrumentales, master cum laude en sampleado y conexiones neuronales deficientes, se pueden hacer realidad muchos sueños. Sigamos mezclando ingredientes al estilo Panoramix: funky y folk en “Elevator Music”; samba, electrónica y R&B en “Cellphone´s Dead”; pop y psicodelia en “Soldier Jane”; trip-hop con armónicas y orquesta en “Dark Star”; scratching y batucadas en “1000 BPM”. Sigamos levantando obras de ingeniería imposible al estilo Calatrava: “Motorcade”, “The Horrible Fanfare/Landslide/Exoskeleton”. Y lo más importante, sigamos regalando al mundo buenas canciones: “Think I´m In Love” (cómo recuerda a “The New Pollution”), “Strange Apparition”, “Nausea” y “The Information” tienen vocación de eternidad sin abundar en excentricidades. Demente, pero ante todo músico. Ahora solo falta rellenar la cuartilla en blanco con el collage adecuado. Uff, no será fácil.